La catedral de Santa María en Tokio fue construida en 1964. Fue diseñada por el arquitecto Kenzō Tange, uno de los arquitectos japoneses más importantes del siglo XX.
A Kenzō Tange le gustaba viajar por Europa para inspirarse. Le fascinaba la forma en la que las catedrales europeas «cortan» el cielo vistas desde el exterior, y la misma vez, cuando estás dentro de ellas, da la sensación es de que hay espacio de sobra en todas direcciones. En el diseño de la catedral de Tokio, Kenzō Tange combinó ambas visiones (Cortar el cielo y amplio espacio en el interior) con su estilo moderno a base de hormigón.
Antes de construir la catedral ya estaba este rincón con una imagen de Nuestra Señora de Lourdes