El otro día paseando por un parque solitario me encontré de repente con esto:
Me acerqué perplejo y me empecé a fijar en las pedazo de cámaras y objetivos que se gastaban pero no conseguía adivinar qué narices estaban fotografiando. Todos apuntaban hacia el bosque con objetivos de hasta 600mm. Pregunté, y un amable señor me explicó que estaban sacando fotos a un búho que estaba camuflado en un tronco a lo lejos. También me explicó que eran todos de un «Club de fotografía de pájaros» y que operaban vía Internet, cuando alguien del club encuentra algún ejemplar poco común o algún lugar donde se acumulan muchos pájaros avisa a todos los demás. De ahí que todos ellos estuvieran con el equipo adecuado delante de un búho en una esquina perdida en un parque solitario, no fue casualidad 🙂
Para mí si que fue una casualidad encontrarme con el búho y desafortunadamente no llevaba el equipo adecuado, esto es lo mejor que pude sacar:



