Ya hablamos hace un tiempo sobre la longevidad de los japoneses y su capacidad para sobrepasar los 100 años de edad. Vamos a ver como esta buena salud de la gente se está convirtiendo en el enemigo número uno de la economía del país.
Los japoneses son los habitantes de la Tierra más longevos. La esperanza de vida de los hombres se acerca a los 80 años y la de las mujeres a los 85. En la prefectura de Okinawa, la esperanza de vida media de las mujeres se acerca a los 90 años. Además Japón tiene el récord por ser el país del mundo con más habitantes centenarios.
Tienen estrés por el trabajo, hay muchos fumadores, son bastante bebedores, hay mucha contaminación en las ciudades… pero la clave parece estar en la dieta. Comen muy pocas grasas, mucho pescado, algas y beben mucho té verde que tiene antioxidantes. Además no suelen atiborrarse comiendo, comen lo justo para llenar la barriga sin quedarse hinchados. Por ejemplo, el postre no suele existir en los restaurantes de día a día cercanos a las empresas. Esta buena alimentación además de alargar la vida hace que haya muy pocos japoneses obesos y casi todos tengan un buen tipo, aunque no suelen ser muy altos.

Este gráfico muestra como a finales de la década que viene casi todo el mundo vivirá hasta cerca de los noventa años. Es curioso ver como «la rampa de la muerte» se va agudizando conforme nos acercamos a los 90/100 años.
El problema es que si además de este dato tenemos en cuenta que la tasa de nacimientos es de las menores del mundo, con tan solo 1.3 hijos por pareja (A pesar de las campañas del gobierno), la población de Japón está en peligro. De hecho el año 2006 fue el primero de la historia moderna en la que se registró una bajada de población. Esta tendencia está previsto que continúe, en pocos años uno de cada cinco japoneses tendrá más de 60 años y se convertirá en un gran problema para la economía. Los jóvenes no serán suficientes como para soportar la pirámide poblacional. Además Japón es un país bastante cerrado a la entrada de inmigrantes que pudieran solucionar este problema, ahora mismo tan solo un 1.2% de la población está compuesta por extranjeros.
Muchas empresas están retrasando la edad de jubilación, pero al mismo tiempo los jóvenes al ver el poco futuro que tienen los planes de pensiones se niegan a pagar. En este artículo cuentan como un investigador de prestigio con varias patentes debajo del brazo apenas está cobrando 170.000 yenes de pensión.
Las empresas se están llevando factorías y centros de investigación a Estados Unidos y China. Por ejemplo, Nissan lleva más de una década sin abrir nuevos centros en Japón. Toyota está siguiendo una estrategia similar y empresas de otros sectores están intentando redirigir sus negocios hacia los ancianos u hacia otros mercados. Sega últimamente está dedicándose a crear juegos de deportes dirigidos al mercado estadounidense más que el mercado local.

Este otro gráfico muestra la predicción del porcentaje de población con más de 60 años hasta el 2050.
En definitiva, el tener buena salud es algo bueno para la gente pero es también una navaja de doble filo que tendrán que vigilar para poder seguir siendo la segunda economía del mundo.
Fuentes: Burtonsys, Dawn.com,International Institute for Applied Systems Analysis.